lunes, 2 de mayo de 2011

LA SERENA (Primavera en la estepa extremeña)

Cigüeña blanca (Ciconia ciconia)
El lunes 25-4 lo dedicamos a llegar a nuestro destino y alojarnos en nuestro centro de operaciones, en el Hostal la Panadería de Benquerencia de la Serena, bueno bonito y barato, y desde el que de buena mañana comenzábamos nuestras rutas por estas formidables tierras extremeñas.
 Galápago leproso (Mauremys leprosa)
La mañana del martes nos dirigimos a la famosa carretera de la Golondrina que atraviesa una muy buena zona para observar aves esteparias. Aquí he visto mis primeros Galápagos leprosos que se soleaban junto a cantarinas ranas en las orillas de la escasa pero imprescindible agua de esta enorme llanura esteparia. 
 Triguero (Emberiza calandra)
Durante todos estos días, el Triguero ha sido la especie más abundante y, cuando viajábamos con la ventanilla del coche bajada, su reclamo fue nuestra monótona banda sonora y su silueta el adorno de árboles, postes y cables.
 Calandria común (Melanocorypha calandra)
En sus típicos vuelos de canto, aletean lentamente las alas, rígidas y rectas, que las hacen parecer aves de mayor tamaño de lo que indican sus escasos 20 cm.
 Cogujada común (Galerida cristata)
En la zona coinciden los dos tipos de cogujadas peninsulares pero, la de la foto, debe tratarse de una común como indica su nombre científico "cristata" y muestra la fotografía con su "cresta" enhiesta.
 Abubilla (Upupa epops)
Pero nuestro mayor descubrimiento fue un ramal que salía de la carretera de la Golondrina, la Cañada Real Segoviana, que en apenas 2 km nos mostró la variada avifauna esteparia en todo su esplendor.
 Mochuelo europeo (Athene noctua)
Junto a una choza semiderruída, compartían territorio Mochuelo, Abubilla, Conejo, Liebre y gigantescos Lagartos ocelados.
 Culebrera europea (Circaetus gallicus)
Las Culebreras nos han acompañado durante todo el viaje y me imagino que muchas de ellas estén todavía migrando. En la Serena se juntaron en algunos momentos 6 ejemplares que tuvieron que aguantar la poca hospitalidad de otra de las rapaces más abundantes de este inhóspito territorio...
 Aguilucho cenizo (Circus pygargus)
Los Aguiluchos cenizos cuentan con importantes colonias en La Serena y como señores de su territorio...
 ... se comportan con agresividad ante cualquier posible rival que merodee por las cercanías.
 En este caso las Culebreras sufrieron los ataques de un numeroso grupo de aguiluchos que las expulsaron con "cajas destempladas", lejos de allí.
 Sisón común (Tetrax tetrax)
Los que mejor se comportaron fueron los Sisones que reclamaban desde cualquier elevación y, esto, ayudaba a localizarlos a gran distancia. Tenía ganas de disfrutarlos a gusto y aquí eran increíblemente abundantes para lo que yo estoy acostumbrado. También localizamos varias Avutardas aisladas, pero no las prestamos tanta atención porque las tenemos más vistas en Tierra de Campos (Palencia).
 Ganga ibérica (Pterocles alchata)
Otras que me fascinaron fueron las Gangas ibéricas con sus reclamos en vuelo que ayudaban a localizarlas. Cuando estaban posadas me resultaba imposible descubrirlas aún sabiendo que allí estaban.
 Ganga ibérica (Pterocles alchata)
Diferentes pero igualmente preciosos los machos (derecha en la foto) y las hembras (izquierda).
 Un Aguilucho cenizo remontaba vuelo con un conejo entre las garras...
 ... cuando una gran rapaz que habíamos observado a gran distancia, posada en el suelo, y no podíamos identificar por los efectos del sol a esas horas del mediodía, hizo su majestuosa aparición en escena. 
 Águila imperial ibérica (Aquila adalberti)
Se trataba de un impresionante, aunque inmaduro, ejemplar de Águila imperial.
 Ni corto ni perezoso, comenzó a tomar altura con la clara intención de hacerse con un importante botín usando, si fuese necesario, la fuerza bruta. 
 Sin embargo el liviano aguilucho no se amedrentó y, en lugar de abandonar su presa ante semejante rival, tomó altura...
Águila imperial ibérica (Aquila adalberti)
Se mezclaron con Buitres leonados, una despistada Culebrera y, tanta altura tomaron, que les perdí enseguida de vista. A escasos 100 mts, 8 Cigüeñas negras y un inmaduro Alimoche cicleaban junto a unas rocas.
Después de todo esto ya me podía volver tranquilo y satisfecho a Laredo... pero aún me quedaban 3 días en Extremadura... pufff, ¡¡cuántas emociones!!

6 comentarios:

  1. Me encanta tu crónica, amigo Ernesto. Una pena que nos hayamos podido coincidir en Monfragüe (cuya crónica tuya espero).

    ResponderEliminar
  2. Aupa Javier. Pues sí, fue una pena no coincidir. Nosotros llegamos el Jueves por la tarde y el Viernes a las 12 ya estabamos camino del norte. Para la crónica de Monfragüe hay que esperar un poco que primero viene una de Alcocer y otra de La Serena.
    Yo también tengo ganas de ver la segunda tuya de ese parque tan especial. Saludos

    ResponderEliminar
  3. Menudo reportaje Ernesto! ¿Cómo coño has conseguido sacar fotos tan buenas del aguilucho y ganga en una sola visita cuando nosotros vivimos al lado y aun no hemos podido? A ver si la próxima vez que te acerques nos podemos ver en el campo. Me encantaría.

    Abrazos
    Sammy

    ResponderEliminar
  4. Suerte, yo creo que hemos tenido suerte, aunque el lugar era magnífico. Me queda pendiente otra entrada de esa zona que también estuvo bien surtida de observaciones.
    Cuando vuelva a Extremadura intentaré contactar contigo Sammy que seguro me llevas a algún lugar de esos que sólo tú conoces.
    Abrazos

    ResponderEliminar
  5. Vaya entrada y vaya fotones!!
    Es un viaje pendiente ir a La Serena. Me atrae mucho más la idea desde que conocí al grupete de personas que siguen al aguilucho cenizo.
    Espero que disfrutes de la estancia (o hayas disfrutado)
    Un saludo!

    ResponderEliminar
  6. Seguro que disfrutarás del viaje y más si vas acompañado de alguien que conozca el terreno.
    Por si te interesa en unos días pondré otra entrada de La Serena con otras observaciones de nuestro último día en la zona.
    Saludos!!

    ResponderEliminar