Me encontraba un día cualquiera del mes pasado, en Cicero (Cantabria), contemplando fascinado el ir y venir de las limícolas a ras de la lámina de agua en busca de un lugar para descansar ante la inminente pleamar y después de haberse alimentado durante buena parte de las 12 horas que dura el ciclo de las mareas.
Un numeroso bando de Correlimos gordos descendía, sin embargo, de lo alto del cielo, imagino que recién llegados a la marisma tras una larga singladura por la mar océana.
Correlimos gordo (Calidris canutus)
Se posaron a bastante distancia pero uno de ellos, quizás exhausto, aterrizó a escasos 5 mts. de donde yo me encontraba. Era un joven con aspecto agotado, con el plumaje ahuecado como de un ave enferma y que se quedó como petrificado durante unos minutos.
Correlimos gordo (Calidris canutus)
Estas aves crían en el alto Ártico con lo que podemos imaginar la magnitud y dificultad de tan tremendo viaje para un correlimos que, aunque grande, no pasará de los 200 gramos.
Por fortuna para nuestro amigo el Sol hizo acto de presencia y pareció recuperarle milagrosamente de su anterior apariencia mortecina.
Correlimos gordo (Calidris canutus)
Se posaron a bastante distancia pero uno de ellos, quizás exhausto, aterrizó a escasos 5 mts. de donde yo me encontraba. Era un joven con aspecto agotado, con el plumaje ahuecado como de un ave enferma y que se quedó como petrificado durante unos minutos.
Correlimos gordo (Calidris canutus)
Estas aves crían en el alto Ártico con lo que podemos imaginar la magnitud y dificultad de tan tremendo viaje para un correlimos que, aunque grande, no pasará de los 200 gramos.
Por fortuna para nuestro amigo el Sol hizo acto de presencia y pareció recuperarle milagrosamente de su anterior apariencia mortecina.
Correlimos gordo (Calidris canutus)
Poco después comenzó a alimentarse con lo que, el en un principio desahuciado correlimos, volvía a luchar por su supervivencia. Suerte para el pobre Correlimos gordo.
Correlimos tridáctilo (Calidris alba)
El ingrávido correlimos de la anterior entrada también es un solitario aunque de aspecto más saludable, y suele desenvolverse entre las gigantes gaviotas de la playa La Salvé de Laredo.
El ingrávido correlimos de la anterior entrada también es un solitario aunque de aspecto más saludable, y suele desenvolverse entre las gigantes gaviotas de la playa La Salvé de Laredo.
En una de sus habituales carreras...
... pero no descuidando la sana alimentación a base de invertebrados marinos.
Correlimos tridáctilo (Calidris alba)
Colimbo chico (Gavia stellata)
Tengo un poco abandonado lo más cercano, así que comentaré un par de breves de las últimas fechas. El día 8-12 asomándome a la playa La Salvé de Laredo por su zona central (son 5 km. de arenal) pude contar 11 Colimbos chicos y 2 Colimbos grandes simultaneamente, por lo que puedo imaginar que el número de ejemplares lo superaría ampliamente en toda la bahía.
Tengo un poco abandonado lo más cercano, así que comentaré un par de breves de las últimas fechas. El día 8-12 asomándome a la playa La Salvé de Laredo por su zona central (son 5 km. de arenal) pude contar 11 Colimbos chicos y 2 Colimbos grandes simultaneamente, por lo que puedo imaginar que el número de ejemplares lo superaría ampliamente en toda la bahía.
Garceta grande (Casmerodius albus)
El día 13-12 en el pólder de Escalante se veían muchos ánsares y entre ellos una Barnacla cariblanca y un Ánsar piquicorto. Cuando la luz casi formaba parte del pasado, esta Garceta grande atravesó la canal en dirección a Montehano.
El día 13-12 en el pólder de Escalante se veían muchos ánsares y entre ellos una Barnacla cariblanca y un Ánsar piquicorto. Cuando la luz casi formaba parte del pasado, esta Garceta grande atravesó la canal en dirección a Montehano.
Mañana trataré de ponerme un poco al día de la marisma.
El correlimos tridáctilo ha sabido posar bien. El reportaje te ha quedado bárbaro. Saludos desde Pucela.
ResponderEliminarFue un buen modelo la verdad. Vosotros ya veo que estuvistéis con buenos guías por el Cantábrico, Ángel y Javi, y además se os dio de maravilla el pajareo. Saludos.
ResponderEliminarEl sol es la vida, amigo Ernesto.
ResponderEliminarSe te da bien esto de las fotos,eh?
Un saludo desde Naburria!
Así es amigo Mikel. Al Sol deberíamos venerar y no a los modernos becerros de oro.
ResponderEliminarYa vi tu comentario del porrón y parece que puede ser un híbrido como tú insinuabas.
Saludos pejinos y gracias por los comentarios.