Las aves son perfectos termómetros de la salud de la Tierra y nos están dando constantes señales de que algo no marcha bien. Cambios muy graves a los que tendremos que poner freno de inmediato si no queremos desaparecer como especie. Los ostreros están cambiando de hábitos ante nuestros incrédulos ojos. Muchos se han vuelto residentes en Islandia ante los inviernos cada vez más suaves que se están sucediendo. Aunque sigue haciendo frío les compensa no iniciar la siempre peligrosa migración al sur. Entre nuestras cigüeñas se ha comprobado que las que deciden no migrar tienen mayores tasas de supervivencia que las más viajeras.
La observación combinada de miles de aficionados a las aves nos ofrecen estos y otros muchos datos muy interesantes sobre la etología y fenología de nuestros pájaros que los científicos tratan de analizar y comprender. Nuestra mera observación y la divulgación de estos datos son muy útiles para extraer multitud de interesantes conclusiones que nos hablan muy a las claras de la evolución de nuestra naturaleza. Ciencia ciudadana la llamamos.
Por ejemplo muchos cucos llegan de su migración prenupcial tarde, cuando muchas de las especies a las que parasitan han comenzado ya la crianza al haberla adelantado esta última década una semana aproximadamente, impidiéndole comportarse como un cuco de pura cepa. Muchos de estos acontecimientos se irán regulando poco a poco aunque estos cambios están sucediendo vertiginosamente y algunas especies no tendrán la capacidad de amoldarse a la misma velocidad.
Estamos asistiendo a la sexta extinción masiva en la Tierra. Las anteriores fueron causadas por catástrofes naturales. En esta ocasión la catástrofe somos nosotros mismos. 30 millones de gorriones han desaparecido en España durante la última década, todo un síntoma. Usos inadecuados de la tierra y el mar, contaminación, cambio climático, sobreexplotación de los recursos naturales...
La gran hambruna de China, entre 1959 y 1961, quiso ser atajada por el gobierno de Mao acabando con todas las aves granívoras, gorriones mayormente, que fueron exterminados con la esperanza de mejorar las cosechas y superar la crisis. Sin embargo el efecto fue perverso ya que estas aves durante la época de cría se alimentan de insectos y su ausencia provocó una plaga de langosta que fue devastadora para la población china. 20 millones de muertos en la mayor hambruna conocida de la historia.
Y es que en la Naturaleza todo está interrelacionado. Como se preguntaba el conocido "efecto mariposa" : ¿El aleteo de una mariposa en Brasil hace aparecer un tornado en Texas?
Esto es, en 2 mundos exactamente iguales, si solo en uno de ellos aletea una mariposa, al cabo de mucho tiempo estos dos mundos serán completamente diferentes.
Como a mí me gusta mucho el planeta en el que vivo no quiero ni pensar cómo puede llegar a ser la Tierra si millones de aves dejasen de aletear en ella. Seguro que no sería tan maravillosa como la conocemos actualmente.
Y como reflexión final:
Hay cosas importantes en la vida como la economía, el dinero... Pero otras son esenciales, como la salud... y el medio ambiente es el fiel reflejo de la salud en la Tierra.
¡Cuidemos nuestra naturaleza!
Y además...
¡Buen pajareo para todos!
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