Se mascaba en el ambiente que el de hoy no era un día cualquiera. El aristócrata Halcón peregrino tomaba posiciones para no perderse nada de lo que iba a acontecer.
A pocos metros, una Gaviota reidora "disfrazada" de pirata, acosaba a una Aguja colinegra que finalmente tuvo que soltar el "tesoro" que portaba en el pico.
Mientras tanto, en la cercana villa de Laredo, una multitud de duendecillos venidos de los bosques de los alrededores, invadían pacíficamente sus calles para regocijo y asombro de los vecinos.
Para la duendecilla Silvia este era su primer desfile y lo ha disfrutado como la que más.
Llegados de intrincados y misteriosos bosques, los trentis también alegraron las calles de la villa pejina. Son duendes de la mitología cántabra que visten con hojas, musgo y raíces. Aunque son muy traviesos, en el fondo tienen un gran corazón, y si pueden te ayudarán si estás en peligro en alguno de sus bosques.
Erni vaya pájaros más curiosos que has cazado esta vez.
ResponderEliminarJr y Ainara
El que me mola mí es el "duende matón" (delante del camión que pone Serafina)....impresionante!!!
ResponderEliminarCómo resistirse a los gnomos del bosque… Sí, que sigan estando, por mucho tiempo, locos estos humanos. Abrazos.
ResponderEliminarSaludos amigos. He sobrevivido a los carnavales del 2011
ResponderEliminarAvistar todo tipo de aves, incluso las especies "más novedosas" es lo tuyo.
ResponderEliminarGracias por la colaboración familiar, ya sabes que, sin ella, esto no sería posible.
Un besuco para l@s peques
Gracias a ti por todo el trabajo que nos regalas Raquel. Saludos
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